domingo, 21 de junio de 2009

Mi verdad


Estoy aburrido, y sin nada que escribir. Asique voy a contar uno de los momentos más traumantes de mi vida, uno que hasta el día de hoy recuerdo y me da escalofrios. Aunque seguramente voy a exagerar , siempre que uno cuenta algo adapta un poco las cosas.
Yo nunca pude sentirme totalmente sincero, siempre senti que distorcionaba los hechos. Estoy empezando a pensar que eso es lo normal, que la sinceridad absoluta es algo bueno como idea pero es imposible de cumplir, más alla de que uno la busque.
Aquel día fue el seis de enero del 2007, feliz día de reyes magos. A falta de regalos, tuve muchas lágrimas.
Yo resién habia llegado de la casa de mi viejo junto con mi hermana, y me
habia parecido rarísimo que Anibal se haya quedado en mi casa charlando con Patricia. ¿Desde cuando se hablan? ¿Por qué no se gritan? ¿De que están hablando?. Esas preguntas se me cruzaron por la cabeza un rato, pero que no les di demasiada importancia. El miedo me invadió cuando los dos, me llamaron a la cocina a mi solo. Me sentaron en una silla estrategicamente ubicada lejos de la puerta para que no pudiese escapar, y me fulminaron con la mirada. Como si de esa manera fuera a escupir todas mis verdades. Temí por lo que pudiesen decirme.
Esperé a que ellos digan algo, pero no lo hicieron. Entonces, pregunte inseguro: "¿Que me querian decir?". Cuando pronunciaron su nombre senti que me derretia, necesitaba morirme en ese instante, desvanecerme, desintegrarme, que algo suceda en ese momento y que interrumpa la peor situación de mi vida. Tragame tierra.
Me preguntaron quien era ella, y dije que no conocía a nadie con ese nombre. Relataron perfectamente como fué la historia entre ella y yo, y yo seguí negandola. Pensé como serian los
días despues de este acontecimiento, como podría verlos a la cara.
Yo a pesar de todo me mantuve tranquilo, calculando friamente mis frases para no contradecirme solo. Hasta que en un momento se salieron de si. Me amenazaban con hablar con mis amigos hasta hacerles hablar. Dijeron "Te crees que si no aprieto un poco a alguno de tus amigos no va a hablar?" Nunca me voy a olvidar de esa frase. No podía creer lo que escuchaba. De todas formas sabia que ellos no iban a hacer nada de eso, aunque no podia entender cuan atrofiado tenian el cerebro como para decir algo así. Yo seguí negando todo.
Anibal dijo "sacalo" y yo no entendí de que hablaban. Fue entonces cuando mi mamá abrió un cajon de la cocina y saco un pilon de hojas escritas. ¿Que era eso?. El peor momento se aproximaba. Mi mamá comenzo a leer los historiales del MSN entre day y yo. Todo. Imaginensé, tenia frases de alto contenido sexual, ja. No es muy lindo que tus viejos vean eso. Me sentí
invadido e inmediatamente empece a llorar, no pude contener las lágrimas. Me levante de la silla, y quise sacarle el pilon de hojas a mi mamá pero no pude. Segui de largo, no iba a quedarme en la cocina, me habian descubierto.
Me encerré en mi habitación y puse Babasónicos a todo lo que daba. Enrealidad hubiese querido poner otra cosa. Alguna banda o canción que hubiese descripto como me sentía. Algo como Radiohead, por ejemplo. Lloré como nunca en mi vida. No sabía con quien hablar y estaba desesperado, asi que la llame a ella. Unos días antes nos habiamos peleado y separado (aunque fue una de esas separaciones de unos días). Yo sabia que ella no queria verme y tambien sabia que con cada llamado la alejaba un poco más. Pero no podía evitar hacerlo. No contesto ninguna de mis llamadas y le deje muchisimos mensajes.

Finalmente, llamó. Pero solo para decirme que la dejara en paz y que no llamara más. Que era un maniático insoportable. Todo lo que decía me lastimaba, y sin embargo no me sentia peor: al menos escuchaba su voz.
Estuve un día entero en mi habitación, destrozado. Me habia peleado con Day y con mis padres. Al menos Anibal ya habia regresado a su casa. Despues de todas esas horas comencé a sentir hambre, nunca en mi vida sufri tanto el hambre. Tuve que pasar por el living hasta llegar a la cocina. Cuando lo crucé, la vi a mi mamá sentada en la computadora como si nada. No podia creer que ella estuviese tan bien, como un día cualquiera, y yo llorando por los rincones.
Despues de la situacion que habia pasado tenia otra perspectiva de lo que me rodeaba. El mundo parecía tan muerto, tan sin color. Yo primero estuve evasivo con mi familia, y cuando me preguntaron que era lo que me pasaba les conteste que no quería hablar. (aclaracion: mis hermanos jamás se enteraron de lo que habia sucedido conmigo y mis padres) Estaba triste y queria mantenerme asi. Me sentia tan mal. Habia perdido al amor de mi vida, y aún peor: la confianza de mis padres. Me odié. Me odié muchisimo. Necesitaba poner distancia de todo. Por algún tiempo no veria a nadie conocido. Pensaria en todo lo que habia sucedido. Y escribiria. Yo queria estar solo para afrontar mi sufrimiento.
Regrese a mi pieza, con la luz apagada, acostado en mi cama, sin televisión y sin música. Solo miraba el techo. Y pensaba. Después de tanto pensar cerre mis ojos y dormi, no tengo ni idea de cuanto dormi, solo sé que me parecio una eternidad.
Cuando me desperte senti que alguien estaba cerca mio. Abri los ojos y tarde en reconocer a la persona que se encontraba junto a mi. Era Brenda. Vino para salvarme, para sacarme de este infierno. Vino porque siempre viene. Amo que venga. La amo. Hermana: sos tan buena y tan linda, y te amo tanto, gracias por todo. Hablamos de cualquier cosa, todo excepto la pelea que tuve con mis viejos, day y mi encierro desde hacia días. Después de unas horas charlando decidimos salir, nos fuimos de casa, y tomamos un helado en el Mc Donalds. Una vez allí me confeso que nuestro papa la habia llamado porque yo estaba mal, y que también llamó a Nahir y no pudo venir. Le conté lo que habia sucedido con Day. Toda la verdad.... Me aconsejó que de alguna manera les explicara lo sucedido a mis papás y decidi hacerles una carta. Bren se fue, y yo me quede solo, otra vez. Al día siguiente mi mamá trabajaba a las 7AM. Y yo tenía los horarios cambiados, y estuve toda la noche haciendoles una carta explicando lo que habia sucedido. Obviamente sin socavar en los detalles que quizás eran los más importantes. Cuando salio el sol, llame a Anibal y le dije que venga a Ramos. Vino unas horas mas tarde, y mi vieja ya se habia levantado. Mi intencion era darsela a los dos y que la leyeran juntos, pero mi mamá me dijo que se debia ir y no iba a esperarme. Tuve que darsela. No me dijo nada, la dejo sobre la mesa y se fue. A las horas llego Anibal, y se la di. La leyo velozmente, me llamo, me la rompio en la cara y se fue sin decirme nada. Volvi al encierro. Estuve una semana encerrado. Al septimo día mi mamá habia querido cortarse las venas, junto con pastillas y alcohol.

(Me cansé de escribir, después sigo)



No hay comentarios:

Ok, te sigo